Respetarte a ti mismo te conduce al éxito, en tu vida, en tus acciones, en tu trabajo y también en tu salud, pero el respecto no es algo que ocurra por accidente, sino que constituye un logro, hay que ganárselo a pulso. Cuando estamos menos dotados buscaremos la guía en otros con más aptitudes y lograremos esos estados saludables que buscamos. Una vida sana, un cuerpo sano, una mente sana, unas relaciones sanas, un trabajo sano, un... lo que tu quieras sano.
Si somos capaces de influir en otros y sobre todo en nosotros mismos, estamos en el buen camino, pero si nos respetan y nos respetamos lograremos la continuidad en nuestro propósito. Y como todos estamos integrados en algún grupo, ya sea tu familia, tu parentela, tu comunidad de vecinos, tu club de fútbol, tus compañeros de trabajo, tienes que saber que tu respeto no te lo da el rango, ni la posición que tengas, ni el color de tu pelo ni tu cuerpo escultural, el respeto se consigue.
- Comienza por respetarte a ti mismo y a quienes están contigo. Estimula las capacidades de los demás en función de sus aptitudes.
- Sobrepasa las expectativas de los demás dando muestras de lo que has sido capaz de hacer.
- Muestra firmeza, mantén la convicción de llegar a tu destino.
- Dótate de seguridad y madurez y no acapares el mérito, distribuyelo entre quienes te acompañan.
- No podrás alentar a otros a que obtengan éxito si tu no lo has logrado previamente.
- Ayuda al progreso de los demás, el beneficio tuyo te llegará por añadidura.
- Pon orden a tus ideas, a tus actos, a tu vida y anticípate a las circunstancias.
Recuerda siempre que el respeto que mereces no es por tu posición, no por ser padre o madre, presidente de la comunidad de vecinos, administrador de la empresa, director de sucursal bancaria, piloto del avión, etc. El respeto has de ganártelo sea cual sea tu función. En lo que te atañe como organismo viviente tienes que ganarte el respeto de tus órganos, de tus sistemas y de tus células y entonces tendrás salud. En Bioevolución te ayudamos a conseguir ese respeto.
- ¿Te respetas comiendo lo que comes, en tipo de alimento y cantidad?
- ¿Te respetas bebiendo lo que bebes? Alcohol, bebidas carbonatadas y edulcoradas.
- ¿Te respetas intoxicándote? Tabaco, drogas, medicamentos, polución, productos químicos de uso diario.
- ¿Te respetas dejando que entre a tu mente lo que entra? Desinformación, chimorreos, publicidad engañosa.
El nivel que te da la posición es el más bajo, el más efímero, sólo obtendrás con este recurso la cantidad más sucinta de respeto, sólo el obligatorio, pero si inspiras confianza, obtienes resultados, desarrollas a quienes están contigo y agregas valor a la vida de los demás, entonces quisiera tenerte cerca, yo y cualquiera. Te habrás ganado el respeto máximo.
No olvides que lo fundamental es:
* Hacer lo verdaderamente importante, no te ocupes sólo de quedar bien. Eso te traería problemas antes o después.
* Mantén la actitud correcta sobre aquellos que están bajo tu influencia, incluido tu mismo. Tu equipo inmediato son tus células, órganos y sistemas.
* Enfócate en aportar, no en recibir. Recibirás como consecuencia.
* Descubre y potencia los dones y talentos de tus equipos, ayúdales a alcanzar su potencial. ¿Sabes cual es el potencial de tu cuerpo para mantenerse sano? ¿Quizá lo maltratas? ¿En que momento?
* Antes de presionar a los demás, hazlo a ti mismo.
* Cultiva relaciones positivas mostrando cercanía, empatiza, desarrolla la armonía.
* Ayuda a ser productivo, practica la ganancia mutua, estimula, alienta y aporta recursos, también a tu organismo.
* Procura que el potencial de todos se pueda desarrollar a beneficio de si mismos. Empezando por el tuyo a beneficio de ti mismo.
Si necesitas ayuda o algo no entendiste, en Bioevolución estamos a tu servicio, para el progreso de tu salud por medios naturales y para el progreso de tu vida.
Cita previa 632 406053, presencial y online. info@bioevolucion.es
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